Ansiedad social (fobia social)
La ansiedad social es un trastorno psicológico caracterizado por un miedo intenso y persistente a ser observado, evaluado o juzgado negativamente por los demás en situaciones sociales o de desempeño público. No se trata de simple timidez, sino de un malestar que puede llegar a interferir gravemente en la vida cotidiana, desde hablar en público o participar en reuniones, hasta comer en presencia de otros o entablar conversaciones casuales.
Los síntomas frecuentes a nivel físico que experiemntan las personas con fobia socialsuelen ser, miedo intenso a situaciones sociales desconocidas, rubor facial, sudoración, temblores, taquicardia.
A nivel cognitivo ( pensamientos) suele aparecer con frecuencia anticipación ansiosa semanas antes de una situación social. Evitación activa de eventos sociales. Creencias como: “haré el ridículo”, “me verán como débil”, “no soy interesante”. Este miedo puede centrarse en situaciones específicas (como hablar en público) o ser generalizado a la mayoría de las interacciones sociales.
¿Por qué aparece la ansiedad social?
La ansiedad social no surge de una sola causa, sino de una combinación de factores:
1. Aprendizajes tempranos experiencias de humillación, burlas o críticas en la infancia pueden generar un miedo profundo a la evaluación social.
2. Factores cognitivos, las personas con ansiedad social suelen tener distorsiones cognitivas, como sobreestimar la probabilidad de cometer errores o subestimar su capacidad para enfrentarlos.
3. Déficits en habilidades sociales, muchos evitan situaciones sociales porque nunca aprendieron estrategias efectivas para relacionarse, lo cual refuerza su inseguridad.
4. Vulnerabilidad biológica, existen estudios que sugieren cierta predisposición genética, o una hipersensibilidad del sistema de alerta ante amenazas sociales.
5. Factores culturales y sociales, sociedades muy exigentes con la imagen o el éxito pueden generar presión excesiva por “encajar” o destacar.
¿Cómo se trata la ansiedad social?
La ansiedad social tiene tratamiento y el pronóstico es muy favorable, especialmente con intervenciones psicológicas basadas en evidencia.
1. Terapia Cognitivo-Conductual (TCC): Es el enfoque más eficaz. El cual se basa en técnicas efectivas, tales como:
- Reestructuración cognitiva: identificar y cambiar pensamientos automáticos negativos.
- Exposición gradual: enfrentar de forma progresiva las situaciones temidas.
- Entrenamiento en habilidades sociales: aprender a iniciar conversaciones, expresar opiniones y manejar críticas.
- Tareas conductuales: como juegos de rol, simulaciones o ejercicios en la vida real.
2. Terapia breve estratégica o sistémica: Utiliza intervenciones concretas, muchas veces paradójicas, para romper los patrones de evitación y reactivar los recursos personales.
3. Mindfulness: Las técnicas de atención plena ayudan a desarrollar una relación distinta con los pensamientos y emociones sociales. observar sin juzgar, aceptar sin reaccionar automáticamente. Esto disminuye la reactividad y aumenta la autocompasión.
4. Tratamiento farmacológico: En casos graves o cuando hay comorbilidades (como depresión), pueden indicarse antidepresivos ISRS (como sertralina o paroxetina). Sin embargo, la medicación no sustituye la terapia psicológica, y debe ser indicada por un psiquiatra.
¿Qué puedes hacer si crees tener ansiedad social?
Reconoce el problema, sin juzgarte. Busca ayuda profesional. Un psicólogo especializado puede ayudarte a recuperar tu seguridad.
No evites las situaciones: el primer paso para vencer el miedo es dejar de huir de él. Comienza con pequeños retos sociales y celebra tus avances.
Conclusión
La ansiedad social es un trastorno tratable que no tiene por qué definir tu vida. Con las herramientas adecuadas y el acompañamiento correcto, es posible pasar del aislamiento al vínculo. Si quisieras tomar una hora puedes agendar aqui
